El suicidio y su prevención en México

Abstract

Definitivamente, no estoy de acuerdo en que el suicidio sea imposible de evitar, ni que se deba "respetar la vida de los demás" permitiéndoles matarse a sí mismos. Creo que no hay frustración en la vida, por insignificante que sea, que pueda justificar el suicidio.Aún queda mucho por investigar sobre este tema. Los estudios que se han realizado han sido objeto de investigaciones superficiales y poco explicativas. En México, los estudios que hasta la fecha se han dedicado al suicidio han sido sólo descriptivos, estudios de casos y sin una aportación explicativa del fenómeno. Falta información sobre características sociales, cognoscitivas, psicológicas y de la presencia o ausencia de claves en la conducta suicida; lo cual podría aportar una cantidad considerable de información para prevenir un creciente aumento en las tasas de suicidio a nivel mundial. Estas investigaciones realizadas en México, desafortunadamente adolecen de muchas/ de estas características. Aunque es muy difícil realizar investigaciones sobre este tema en particular, debido a la complejidad del fenómeno, a la naturaleza del mismo tema y al estigma que suele rodear a la persona suicida, tal como ya se ha visto en el apartado sobre las dificultades metodológicas sobre el suicidio, creo que sería muy interesante realizar una buena investigación sobre el suicidio en México. Para esto será necesario contar con el apoyo de centros de salud pública, con el apoyo de médicos, psicólogos y psiquiatras y en general de los profesionales de la salud, con el apoyo de las autoridades gubernamentales (ya que ha de ser impactante el número de muertes "reales" por suicidio en cada entidad), y sobre todo, contar con el suficiente interés de parte de los investigadores para no desanimarse por los obstáculos que se les vayan presentando. El suicidio siempre será un grave problema de salud pública, que multiplica el número de muertes innecesarias, especialmente las que se consideran prematuras y trágicas. Está en nuestras manos el hacer algo al respecto, como psicólogos y profesionales de la salud. Sabemos que es difícil reconocer a las personas susceptibles al suicidio y aún los intentos leves son considerados como actos para llamar la atención. Pero desafortunadamente, a veces sigue la tragedia . Hay algunos signos de advertencia que deben hacer a los familiares o al mismo terapeuta sospechar un suicidio inminente. La característica más destacada es la depresión, con toda su sintomatología que presenta. Es imprescindible advertir a tiempo estos síntomas y a la menor sospecha, buscar ayuda profesional antes que ocurra algo de lo que podamos arrepentirnos toda la vida. Todos cometemos errores alguna vez en el transcurso de nuestra vida y tal vez los errores nos depriman hasta el grado en que no vemos ninguna salida. Algunas personas consideran que el suicida es víctima de sus propios errores. Hay quienes consideran que las circunstancias (socioeconómicas o afectivas tales como pérdida del empleo o conflictos familiares) han causado su depresión y le "han llevado al suicidio". Sin embargo, creo que tal vez la persona sea víctima de sus errores y de las circunstancias, pero debe enfrentar estas circunstancias responsabilizándose de sus acciones y de su vida misma. De cualquier manera, nosotros como psicólogos y como profesionales del campo de la salud, debemos de tomar las medidas preventivas informando a nuestra sociedad del problema que estamos viviendo. Nosotros podemos reducir el dolor y la perturbación de un pensamiento suicida. Antes de averiguar averiguar las causas del pensamiento, lo primordial es salvar la vida de la persona. El mejor tratamiento que se le puede brindar a una persona con intenciones suicidas es el AMOR: amor por parte de su familia, de sus amigos y del psicólogo.